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PAREJA E HIJOS PEQUEÑOS, ¿CÓMO CUIDAMOS LA RELACIÓN?

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Si en general recibimos poca información & educación sobre como crear relaciones de pareja sanas y duraderas aún menos en como cuidar y nutrir la relación cuando tenemos hijos pequeños, ¿verdad? de repente nos encontramos solos ante este nuevo escenario en el que pasan y se mueven muchas cosas y no siempre sabemos como gestionarlo o tenemos las mejores herramientas para hacerlo de la mejor manera o de la forma que nos gustaría.

¿Dónde queda la relación con niños pequeños?, ¿Dónde queda la atención y energía para el otro?, ¿Dónde quedan esos momentos “románticos” esos viajes de pareja esas charlas interminables esos momentos de silencio y descanso. Parece que a veces con niños pequeños muchos de estos momentos desaparecen y la relación queda en otro plano... nosotros no negamos que esto pasa, lo hemos notado mucho más con el segundo hijo pero con responsabilidad, intención y compromiso podemos intentar surfearlo de la mejor manera y crear un equipo aún más sólido y consciente.

 

 

NUESTROS 10 APRENDIZAJES 

 

Cuidar de nosotros mismos y nuestra energía vital.

Parece lo más fácil pero a veces resulta ser a lo que más nos resistimos, ¿por que? Auto-cuidarnos, nutrirnos es una expresión de amor hacia nosotros mismos de responsabilidad personal. Estar bien para nosotras mismas no solo para el otro. Además cuidarnos para poder cuidar mejor, más ligeras , más tranquilas y más alegres. Para mi es una prioridad y no es negociable, busco aunque sean 20 minutos al día para estar sola y hacer lo que más me apetezca en el momento, normalmente es un baño en silencio con velas y aromas, bailar, un paseo en la naturaleza, yoga, una llamada, etc.. lo que creas que puedas gestionar y te vaya bien para recargar energía y soltar. Por ejemplo, para Kris es esencial el ejercicio físico y la meditación en la mañana. Respetamos esos momentos a solas y en equipo hacemos lo posible para que los dos los tengamos a lo largo del día. También somos conscientes de la necesidad de dar ejemplo a nuestros hijos para que en un futuro lo hagan ellos también, no es egoísmo es amor.

Importante comunicarlo y compartirlo con el otro para que pueda entender dónde estás y ayudarte a que pase.  

 Poner distancia y no tomarnos nada personal.

Es una etapa en la que dormimos menos, estamos más cansados, no tenemos tanto tiempo para nosotros, los niños piden mucha atención, las dinámicas cambian… y así nos lo tomamos, como una etapa de nuestra vida ahora sobre todo cuando los bebés son tan pequeños. Intentamos no entrar en conflictos o en no poner demasiada atención a las pequeñas cosas que no nos aportan, no identificarnos con los momentos de tensión o irritabilidad y si sale algún grito pues lo sostenemos y no lo juzgamos. Hacemos lo que podemos y los dos lo sabemos, es un surfear, hay días de todo, lo aceptamos e intentamos más que nunca no tomarnos las cosas personales.

 Pequeños rituales de conexión e intimidad.

Aunque sean pocos, sin duda muchos menos que antes, intentar crearlos y honrarlos. Poner consciencia en la necesidad de poder expresar y ser escuchado, en recibir un abrazo, en sentirte apoyado, acariciado, sostenido y acompañado. Algunos de nuestros pequeños momentos que damos espacio ahora son;

  • 5 minutos de total presencia donde uno habla y el otro escucha: Momento para expresarse desde el corazón como uno se siente, donde se encuentra, sus preocupaciones, motivaciones, realizaciones, lo que sea que necesite compartir. La otra persona escucha abiertamente. Si es algo que requiera la atención del otro se pide con respeto como una necesidad personal y entre los dos se busca un acuerdo o un ajuste que deje a los dos satisfechos. Aconsejamos que no sea un momento para hablar de la lista de TO DO’S, para eso se tendrá que encontrar otro momento.
  • Unas respiraciones conscientes juntos antes de ir a dormir mientras nos miramos a los ojos seguidos por un GRACIAS. Compartimos lo que queremos agradecer al otro si tenemos algo que queremos compartir y pensamos que es importante que el otro lo sepa. Por ejemplo; gracias por cocinar hoy esta cena tan rica o gracias por ir a buscar al niño al colegio y dejarme durmiendo... puede ser cualquier cosa, si buscamos seguro que nos salen muchas por las que estar agradecido.
  • Micromomentos o gestos de conexión: Abrazo largo y beso de buenos días, algo muy pequeño pero tan grande como esto aporta mucho. En nuestras noches pasan cosas, Koa se despierta a hacer pecho, Joy viene a nuestra cama a buscarnos, nos desvelamos y nos volvemos a dormir, nos cambiamos de camas, ¡vaya! cada noche es diferente ahora mismo. Cuando nos encontramos por la mañana uno ha dormido más que el otro, otro se ha despertado antes, uno ya ha salido… cuando nos vemos agradecemos mucho un abrazo largo intencionado de buenos días, ese abrazo que recarga y conecta.
  • Paseos en silencio por la naturaleza. A veces salimos los 3 con el bebé a pasear, muchas veces ni hablamos, caminamos, respiramos y sentimos la presencia del otro y con eso nos basta. Quizás en este momento aprovechamos y compartimos todo lo que tenemos que hacer si hace falta, pero a veces solo nos apetece estar en silencio, cogernos la mano como novios y disfrutar del paseo. Para mi este momento también se ha convertido en un pequeño ritual de conexión.

⎊ Respetar el sentir del otro, crear equipo.

Todas las emociones son válidas. Para nosotros no existe eso de ¡Eso es una tontería!. Como pareja respetamos la emoción del otro y si a veces nos cuesta acompañarla nos va bien solo estar allí sin decir nada respetando lo que la otra persona necesita en ese momento.

Esto crea EQUIPO. Escribo EQUIPO en mayúsculas porque es aquí cuando para nosotros más sentido tiene esta palabra. SER un equipo. En un equipo uno hace de airbag del otro, pide ayuda si es necesario, delega, confía y comparte… Aquí no importa si es el padre o la madre, lo importante es no sentiros solos sabiendo también pedir ayuda cuando es necesario y no cargarse uno con todo ( voluntariamente o involuntariamente).

⎊ Polaridad

Cuando tenemos hijos, llevamos una casa, trabajamos, planeamos, hacemos listas, organizamos, estamos la mayoría del tiempo en la energía masculina. Desde allí es más difícil encontrarse con el otro sino es para preguntar si ha comprado pañales o qué hay que hacer para cenar. Con consciencia, atención y habilidad podemos recurrir a la polaridad siempre que queramos cambiando a una energía más femenina, una energia intuitiva, sensible que surge de solo estar y sentir. Algunas cositas que pueden ayudar a romper esta dinámica más masculina; encender una velita para crear un ambiente más íntimo, un susurro en el oído, bajar al cuerpo con una caricia o abrazo en un momento de estrés para el otro, estar en casa relajados escuchando un poco de música con un té o café, bailar, etc

 Agendar un pequeño date.

Poner en la agenda un cita. Poneros “guap@s” y salir a comer, a ver una película, a pasear, incluso pasar una noche de hotel fuera de casa al estilo novios en el caso que los niños sean más mayores. Sí, lo sabemos… Al principio puede dar pereza o incluso no nos puede apetecer pero no nos damos cuenta de lo necesario que es hasta que lo hacemos y nos sentimos completamente satisfechos por ello. ¿Una cita al mes? ¡Porque no!

⎊ No caer en la queja y el reproche.

Que las conversaciones con tu pareja no entren en un bucle de queja y reproche es algo que se tiene que tener muy en cuenta. Cuando te veas allí, respira, para y pon atención a las palabras que vas a decir. La comunicación se puede volver muy disfuncional, negativa e hiriente.

 Poner un toque de humor.

A veces nos sale reír por no llorar… o reímos y lloramos al mismo tiempo… Reírnos de una situación en concreto o de nosotros mismos nos va ayudar a no tomárnoslo tan en serio y poder ver las cosas desde otra perspectiva. Vivamos esta etapa con un poco de humor y quedémonos con todos esos bonitos momentos que nos llenan el corazón.

⎊ Menos hacer más estar.

Nos ha ayudado mucho para no estresarnos y que los niños no se estresen hacer solo UN plan por día. Vemos que cuando queremos hacer mucho allí la cosa se nos va de las manos y todos nos colapsamos. Un plan por día, con tranquilidad, sin prisas ni presiones, ser conscientes de nuestros límites y de los límites de nuestros hijos nos ayudará a que todo fluya de una manera más orgánica y serena y así poder mantener la armonía en casa.

⎊ No des al otro por hecho

Este es nuestro mantra y lo amamos. No somos de nadie ni pertenecemos al otro. Es una elección que hacemos cada día en compartir nuestra vida con la otra persona. Puedes decidir cuidar la relación o no, nosotros lo hacemos porque queremos estar juntos muchos años más y eso requiere una especial atención y compromiso.

 

Estos son algunos de los aprendizajes que hemos querido compartir con vosotros. Nosotros seguimos aprendiendo y construyendo. No hay una sola manera de hacerlo. Obviamente cada pareja es un escenario diferente, no caigáis en la trampa de las opiniones externas, de los deberíais o de las comparaciones con otras familias. Con intención encontrad vuestra fórmula y confiad en el amor.

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Con amor,

 AMA AMA

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